lunes, 3 de diciembre de 2007

Por el camino de Swann (Marcel Proust)

.









Apreciado visitante!!
Antes que nada,quiero dirigirme a tí,para agradecerte tu visita.Al mismo tiempo ,quiero pensar que la Navidad está cerca y eso se nota en vuestras intervenciones(quizás sean figuraciones mías) pero las noto con una gran sinceridad,como si me ofrecierais algo muy personal y lleno de espiritualidad,algo que voy logicamente a atesorar...Por citar un ejemplo,en el post último publicado,de la escultura totémica...
Abrí mi corazón ante vosotr@s y recibí como recompensa,lo que más puede anhelar un artista,vuestro más sincero parecer.Muchas gracias.
Veo que estamos en la misma onda y nuestras almas,quizás no siempre convergen,pero no dudo que discurren paralelas...
He recibido un correo privado,donde se me preguntaba por ese texto de Proust que referí...Pues bien amig@s,para quien no lo conozca,aquí pego un estracto.Si me permitís haré una pequeña introducción,aunque huelga ,pues seguro todos conocéis a Proust,pero si alguien no lo conoce,se lo recomiendo encarecidamente.Para mí está en el top five de mis cinco escritores de cabecera.
Ese pequeño fragmento que leerás,es de "Por el camino de Swann"novela que forma parte de en busca del tiempo perdido.
Para mí punto de vista,es una obra tan exquisita,con tanta sensibilidad y tan extraordinariamente genial,que debería ser de lectura obligatoria a partir de la edad adolescente,cuando más necesario es tener referentes..Pues es puro bálsamo para el alma,...
Cuando llegó a mi vida este libro que inmenso placer y gozo sentí,de repente muchas emociones que experimentaba las ví reflejadas ahí y tan magistralmente descritas...,fue a partir de una de esas famosas"casualidades"y puedo jurar,que cambió mi forma de pensar,modeló mi parecer....
Te doy mi palabra de honor visitante!!!
Ahí va ese fragmento prometido,que remite a lo que sintió Marcel Proust...

-Marcel Proust. En busca del tiempo perdido. Por el camino de Swann.
Hacía ya varios años que, de Combray, no existía para mí más que el escenario y el drama de acostarme, cuando un día de invierno, al verme entrar en casa, mi madre vio que tenía frío y me propuso que tomara, contra mi costumbre, un poco de té. Al principo no quise, y no sé por qué cambié de opinión. Mandó a buscar uno de esos dulces compactos y abultados llamados magdalenas que parecen moldeados en la valva estriada de una concha de Saint Jacques. Y maquinalmente, abatido por la sombría jornada y la triste perspectiva del día siguiente, me acerqué a los labios una cucharada del té donde dejé ablandarse un pedazo de magdalena. Pero en el mismo momento en que el sorbo mezclado con las migas del dulce rozó mi paladar, me estremecí, atento a lo que de extraordinario ocurría en mí. Me había invadido un placer delicioso, aislado, sin la noción de su causa, que volvió indiferentes las vicisitudes de la vida, inofensivos sus desastres, ilusoria su brevedad, de la misma manera que obra el amor, llenándome de una esencia preciosa; o, más que venir a mí, esa esencia era yo mismo. Dejé de sentirme mediocre, contingente, mortal. ¿De dónde procedería aquella intensa alegría? Sentía que iba unida al sabor del té y del dulce, pero que lo rebasaba infinitamente, no debiendo ser de la misma naturaleza. ¿De dónde venía? ¿Qué significaba? ¿Dónde aprehenderla?


Espero que te haya gustado
Vuelve pronto..
vilatrenca

4 comentarios:

mandarina dijo...

Existen determinadas cosas que no sólo me hacen la vida más llevadera sino que se han convertido en detalles sin los que me sería difícil vivir.
Hablo de una taza de café a primera hora del día, de una ducha calentita antes de acostarme, de una buena caminata (siempre que el tiempo lo permita) y, por supuesto, de un buen libro sobre mi mesita de noche.

No he leído nada de Marcel Proust, aunque si había oído hablar de él, puesto que nos lo recomiendas tan encarecidamente... en mi próxima visita a la librería me lo pienso comprar.
Para mi leer es aprender, conocer, compartir.... así que entiendo perfectamente tu entusiasmo.
Cuando he leído el fragmento que nos has puesto, no he podido evitar meterme en el personaje y pensar que ahora en pleno siglo XXI no apreciamos estos pequeños placeres cotidianos, es decir, que responden más a hábitos que a placeres necesarios propiamente dichos.
Una lastima!!

vila trenca dijo...

Mandarina!
Desde luego que recomiendo la lectura de este libro,es todo un clásico del siglo XX.
Bajo mi punto de vista,Proust es el mago de la palabra y la sensibilidad literaria..Por supuesto,con permiso de tantos y grandes poetas...
Si lees el libro creo que te va a encantar,pues tu eres una persona apasionada por el gozo de la lectura y ya verás mandarina,como en plena lectura y de repente...te encontrarás paseando por esas callecitas de Combray....
Tambien quiero decirte(no,no es como acaba el libro......)Que es fantástico,pues nos remite al tiempo ya perdido,dándonos unas claves a los lectores,para que no lo perdamos nosotros.
Un abrazo y gracias por tu aportación.
Lluís Vila Teruel

moonlover dijo...

Dear Lluis, I thank you for your proposal, I will realy look for it next time,
the reading of this small part left me wanting to read the rest ;)
I will let you know my feelings about it.

a mi me hay gustado mucho
un beso
moon

vila trenca dijo...

Hola Moonlover!!
Que bien que te haya gustado!!No hay nada como ser políglota como tu y hablar diferentes lenguas...
Aunque eres una persona que perfectamente puede leer en varios idiomas,yo te recomiendo amiga que tomes la edición francesa,pues es MUY importante que todas las palabras queden bastante claras,así de este modo sentirás totalmente ese maravillosa narrativa...
No se,me imagino que si es fantástico leer a Pessoa traducido,que tiene que ser leerlo en portugués o en inglés?Algo fantástico,seguro.
Conociendo un poco como eres ,pienso,casi estoy seguro que te va a encantar,ya me contarás...

Un abrazo.
Lluis Vila Teruel